sábado, 28 de enero de 2017

YO TE AMO

-“Te amo” - dijo el principito…
-“Yo también te quiero” - dijo la rosa.
-“No es lo mismo” - respondió él…
"Querer es tomar posesión de algo, de alguien. Es buscar en los demás eso que llena las expectativas personales de afecto, de compañía…Querer es hacer nuestro lo que no nos pertenece, es adueñarnos o desear algo para completarnos, porque en algún punto nos reconocemos carentes.
Querer es esperar, es apegarse a las cosas y a las personas desde nuestras necesidades. Entonces, cuando no tenemos reciprocidad hay sufrimiento. Cuando el “bien” querido no nos corresponde, nos sentimos frustrados y decepcionados.
Si quiero a alguien, tengo expectativas, espero algo. Si la otra persona no me da lo que espero, sufro. El problema es que hay una mayor probabilidad de que la otra persona tenga otras motivaciones, pues todos somos muy diferentes. Cada ser humano es un universo.
Amar es desear lo mejor para el otro, aún cuando tenga motivaciones muy distintas. Amar es permitir que seas feliz, aún cuando tu camino sea diferente al mío. Es un sentimiento desinteresado que nace en un donarse, es darse por completo desde el corazón. Por esto, el amor nunca será causa de sufrimiento.
Cuando una persona dice que ha sufrido por amor, en realidad ha sufrido por querer, no por amar. Se sufre por apegos. Si realmente se ama, no puede sufrir, pues nada ha esperado del otro.
Cuando amamos nos entregamos sin pedir nada a cambio, por el simple y puro placer de dar. Pero es cierto también que esta entrega, este darse, desinteresado, solo se da en el conocimiento. Solo podemos amar lo que conocemos, porque amar implica tirarse al vacío, confiar la vida y el alma. Y el alma no se indemniza. Y conocerse es justamente saber de vos, de tus alegrías, de tu paz, pero también de tus enojos, de tus luchas, de tu error. Porque el amor trasciende el enojo, la lucha, el error y no es solo para momentos de alegría.
Amar es la confianza plena de que pase lo que pase vas a estar, no porque me debas nada, no con posesión egoísta, sino estar, en silenciosa compañía. Amar es saber que no te cambia el tiempo, ni las tempestades, ni mis inviernos.
Amar es darte un lugar en mi corazón para que te quedes como padre, madre, hermano, hijo, amigo y saber que en el tuyo hay un lugar para mí.
Dar amor no agota el amor, por el contrario, lo aumenta. La manera de devolver tanto amor, es abrir el corazón y dejarse amar.”
-“Ya entendí” - dijo la rosa.
-” No lo entiendas, vívelo” -dijo el principito.

viernes, 27 de enero de 2017

NADIE PIERDE POR DAR AMOR, PIERDE QUIEN NO SABE RECIBIRLO.

En algunas oportunidades nos habremos podido sentir mal por pensar que hemos desperdiciado nuestros sentimientos en alguien que no supo valorar aquello que le dimos. Sin embargo, aunque a veces pueda dolernos, es el que sabe amar el que mayor provecho puede sacar de una relación.
La persona que ama logra conectarse con la energía de la vida, aquella que hace que todo tenga sentido, logra inyectarse una dosis de entusiasmo, de fuerza, de vitalidad, que solo quienes han amado entienden cómo ocurre, cómo funciona ese motor para no solamente activar nuestras hormonas y ver el mundo en colores y pensar que todo es posible, sino para motivarnos a ser cada día mejores, para querer dar lo mejor de nosotros.
Evidentemente esto es una ganancia, no todos saben amar, no todos tienen la dicha de guardar a alguien en el corazón y sentir cómo este late más profundo, con mayor sentido.
Cierto es que antes de poder amar a alguien, debemos poder hacerlo con nosotros mismos, debemos ser capaces de preservar nuestra integridad, ser capaces de respetarnos y de procurar para nosotros lo mejor y muchas veces resulta complicado aceptar que lo que podamos sentir no sea retribuido.
Sin embargo, el aceptar que no hemos sido correspondidos, no es un pérdida, es una lección, pero la experiencia enriquecedora de haber amado, no nos la quita el hecho de no recibir lo que nos gustaría a cambio y aceptarlo reafirma el concepto puro del amor, ése que no espera algo a cambio, que se siente de manera independiente a las circunstancias, lo que nos define, lo que somos.
Quien no sabe recibir amor, bien sea por desinterés o porque no está en condiciones de hacerlo es quien pierde en el asunto y esto se debe no solo entender, sino respetar. No todos aprenden tan rápido la lección de nuestro propósito acá de amar y ser amados o bien algunos seleccionan a otras personas para ello. Muchas veces ocurre que amamos a quien no nos ama y a quien nos ama no lo amamos, esto es válido, uno decide qué sentir, uno selecciona por quien sentirlo y lo que es bueno para uno debe serlo para los demás.
Puede que nos decepcionemos por no recibir lo que queremos, pero esto jamás puede sembrarnos la sensación de pérdida, amar es una dicha, mucho más gratificante cuando se obtiene de vuelta, pero de cualquier manera un motivo para agradecer al universo por estar aquí, por estar vivos, porque algo nos hace vibrar, porque algo nos hace inclusive llorar, porque todas las experiencias, nos gusten o no, son para nuestro crecimiento y son la muestra perfecta de que estar aquí es totalmente emocionante!

sábado, 7 de enero de 2017

CREE EN TI, CREE EN TU SUEÑO.

Nuestras vidas son forjadas por sueños. Lo que somos y donde estamos hoy es el resultado de sueños hechos realidad. Cada edificio que ves, cada cosa, surgió de la imaginación de alguien. Detente y piensa, cada cosa que tocamos es el resultado de un sueño hecho realidad.
Asi que el soñar es una práctica saludable. Woodrow Wilson dijo: ''Nos engrandecemos por nuestros sueños. Todos los grandes seres humanos son soñadores.''
Por lo tanto, es muy importante poseer una imaginación positiva. Tener sueños es como el mapa de la ruta hacia el éxito. Y nadie emprendería un largo viaje a un lugar desconocido sin primero consultar un mapa, ¿cierto? .Por lo que podemos deducir que aquellos que no tienen sueños o metas por las cuales esforzarse vagan a la deriva, dando vueltas en círculos y nunca logran algo significativo.
Los sueños son producto de tu propio subconsciente. Hay que quienes afirman también que los sueños son una dádiva de Dios. Pero desafortunadamente muchos permiten que la vida le robe sus sueños.
Te preguntarás : ¿Pero y cómo alguien puede robarte tus sueños?. El ladrón toma la forma de muchas personas y circunstancias. Tus padres, tus amigos, asociados y colegas pueden de forma inocente e ignorante robarte tus sueños. Lo hacen cuando te dicen  frases como estas:
¿Qué te hace pensar que tú puedes hacer eso? No resultará. Eso es imposible. Descarta esa idea. Eso no va a funcionar.
Pero si es tu visión, tu plegaria, tu sueño....¿por qué darte por vencido tan fácilmente?. Dale una oportunidad y nunca permitas que nadie tome esa decisión por ti y destruya tu sueño.
Dexter Yager en su libro ´´No permitas que nadie te robe tu sueño´´ nos sugiere un contraataque!!!.El nos comparte la siguiente reflexión :
''Cuando permites que alguien te desanime, no te quedes desanimado y supera ese estado. El camino hacia el éxito no está bien pavimentadoPara triunfar tienes que trabajar duro y planificar tu propia ruta. Habrá quienes continuamente traten de desanimarte y encontrarás muchos otros obstáculos a lo largo del camino. Tienes que superar esas situaciones y sobreponerte a las dificultades, teniendo presente que antes de hacer un camino primero hay que preparar el terreno''.
Por cada sueño que se hace realidad, ¡ miles son robados!. Para ser ganadores tenemos que aprender a superar la crítica.
CREE EN TI, CREE EN TU SUEÑO y no permitas que nadie te lo robe, desanimándote y olvidando o relegando tu sueño. En vez de esto, fortalécete con los desafíos, los retos y los obstáculos que debes enfrentar para hacerlo realidad. Si, en vez de dejar que te roben tu sueño, HAZ REALIDAD TU SUEÑO, TU PUEDES. Diviértete en el proceso, aprendiendo cada día, madurando, evolucionando, haciéndote cada vez más fuerte y más sabio. Disfruta el camino de convertir tu sueños en realidad.
Concluyo con estas frases célebres, muy relacionadas con el tema. Deseo que junto a estas palabras que te he compartido, te sirvan de inspiración y motivación:
Tanto si crees que puedes como si no, tienes toda la razón. (Henry Ford)
Si puedes soñarlo, puedes lograrlo. (Walt Disney)


lunes, 2 de enero de 2017

SI TE QUIERES QUEDAR...

Si te quieres quedar, ven, toma mi mano y déjame mostrarte lo mejor y lo peor de mí. Pero debes saber que pondré el cielo y el infierno a tus pies, una y mil veces. Alguien alguna vez me dijo que siempre siento y vivo todo al cien, y es cierto. Cuando me enamoro, me enamoro con todo y me muero en la raya por esa persona, así que jamás podrás dudar de lo que siento.

Si piensas estar aquí tienes que saber que, posiblemente, te voy a escribir cartas de lo más cursi, te diré mis secretos y sueños al oído. Y por supuesto que también te daré ese lado pervertido que habita en mi persona. Pero también tienes que saber que quiero un amor que de tan solo al pensar en esa persona me haga vibrar no solo el corazón, sino también el alma, que haga que me brillen los ojos, la sonrisa y hasta la vida. Un amor que me haga querer ser mejor, siendo yo misma, que me ame con todo y por todo lo que soy o no soy. Un amor sin prisas, de esos que se saborean y disfrutan despacito y con cada parte de tu ser. Un amor que no le importe ser cursi, y que demuestre con hechos, lo que dice con palabras.  Algo que sea de dos y no haya espacio para inseguridades. Un amor de equipo, porque si llegamos a estar juntos seremos eso, un equipo.

Un amor lleno de eternidad y sinceridad; porque ya no quiero más amores fugaces. Sabiendo que las cosas ya no duran, quiero un amor que dure hasta la muerte, mi muerte, tu muerte, ¡la muerte de quien sea! pero que dure.

Quiero quedarme en casa a ver películas y a mitad de éstas empezar a abrazarnos, que me beses el cuello y bueno… Un amor que me mire como si se hubiera ganado la lotería. Un amor que me haga sentir la persona más segura del mundo estando entre sus brazos, y que viva conmigo ese momento, solo dejándonos ser. Un amor que me haga levantarme todos los días con una sonrisa de oreja a oreja, y diciéndome a mí misma lo afortunada que soy porque estemos en nuestras vidas. Un amor al que no le importe mis tonterías y niñadas, porque vaya que soy muy simple, y aún mejor, que se ría conmigo o de mí, pero que disfrute de verme ser tan plena cuando río. Un amor que me coma la boca a besos, que me quite las dudas con abrazos tan fuertes que no quepan signos de interrogación, y se lleve los malos recuerdos con caricias sinceras, de corazón a corazón.

Un amor en el que no haya espacio para orgullos.

Alguien a quien no le importe mi pasado y lo estuviera antes de nosotros, que me quiera aun en mis momentos más confusos y difíciles, porque ahí es cuando más lo necesitaré a mi lado. Un amor que sepa que habrá obstáculos en nuestro camino, pero que quiera estar ahí para superarlos juntos. Un amor que aun sin tocarnos, nos hagamos sentir el brillo de todas las estrellas brotando desde lo más profundo de nosotros. Que no solo sea mi pareja, sino también mi mejor amigo, alguien con quien pueda reír, llorar y hasta salir de fiesta sin miedo, pena o freno alguno. Quiero estar con alguien que, aun cuando yo sea lluvia me haga volverme el más bonito atardecer, y que busque pretextos sólo para verme feliz.

Quiero encontrar alguien que tenga miedo de perderme.

Un amor donde sólo seamos dos y pudiendo elegir a cualquier otro, siempre decidamos elegirnos a nosotros. Algo donde sepamos que no somos ni vamos a ser perfectos, algo que sí, va a tener errores, heridas y puede que hasta grietas, pero que a pesar de eso parezca que no hay nadie mejor. Alguien que me haga sentir de cabeza y en la luna, que cuando pase mis dedos por su espalda sea como recorrer sus estrellas y cuando nuestros cuerpos se junten me inunde con sus galaxias. Un amor que me arranque los miedos de raíz, apretándome con fuerza contra su cuerpo, viéndome a los ojos solo para decirme todo sin pronunciar una sola palabra y llenarme de calma la vida.

Quiero poder compartirlo con alguien que quiera estar aquí y quiera quedarse a ver todo lo que puede venir.

Si piensas quedarte, puedes tener la certeza de que todo será mutuo. Que te voy a amar y a valorar en todo momento, y que ya no seremos ni tú ni yo, sino nosotros.


Artículo por María Jose Carrasco.

Fuente: Upsocl